
PEDIDO: AYÚDANOS, PERDÓNA NUESTROS PECADOS Y EXTIENDE TU SALVACIÓN
VERSÍCULO PARA MEMORIZAR:
“Oh Dios y salvador nuestro,
por la gloria de tu nombre, ayúdanos;
por tu nombre, líbranos y perdona nuestros pecados”
SALMO 79:9
COMENTARIO HISTÓRICO DE SALMOS 79
El salmo comienza con una descripción de Jerusalén en ruinas, sigue con una plegaria por la liberación y termina con un cántico de alabanza. El versículo nueve resalta que Dios es nuestro Salvador. Cristo es el Salvador del mundo porque pagó con su muerte el derecho de rescatar a la raza humana caída.
Sin embargo, para que los méritos de Cristo sean acreditados a nuestro favor, debemos creer y declarar: CRISTO, TE ACEPTO COMO MI SALVADOR PERSONAL: Con esta declaración de fe, Dios acredita todos los méritos salvíficos de Cristo en nuestro favor.
Luego debemos suplicar que nos ayude y nos libre del mal. El salmista añade pedidos que deben estar siempre en nuestros labios: Suplicar ayuda divina para enfrentar las faenas de nuestro cotidiano vivir; pedir en cada circunstancia: “No dejes caer en tentación y líbranos del mal”.
En tercer lugar, pide por el perdón de los pecados. ¿Qué alternativas estamos usando para LIBRARNOS DE LAS TENTACIONES Y DEL PECADO? Analicemos nuestra realidad:
1) Justificar nuestros malos actos, aduciendo que otros cometen peores faltas;
2) Postergar la confesión de nuestros pecados, porque deseamos seguirlo cometiendo;
3) Pedir el perdón de nuestras faltas en cuanto percibimos que nos estamos alejando de Dios.
CITA SELECTA
“Muchos de los que están buscando con sinceridad la santidad de corazón y la pureza de vida parecen perplejos y desanimados. Están constantemente mirándose a sí mismos, y lamentando su falta de fe; y debido a que no tienen fe sienten que no pueden aspirar a las bendiciones de Dios… Deben volver su mirada de sí mismos, y espaciarse en la misericordia y la bondad de Dios, repasando sus promesas, y entonces sencillamente creer que él cumplirá su palabra. No hemos de confiar en nuestra fe, sino en las promesas de Dios. Cuando nos arrepentimos de nuestras transgresiones pasadas, y resolvemos prestar obediencia en el futuro, debemos creer que Dios, por causa de Cristo, nos acepta y perdona nuestros pecados”.
LA EDIFICACIÓN DEL CARÁCTER, P.88
ORACIÓN:
PADRE. GRACIAS POR PERDONAR CONTÍNUAMENTE NUESTROS PECADOS, QUE TU SANTO ESPÍRITU AGUDICE NUESTRAS CONCIENCIAS PARA CONOCER CUANDO ESTEMOS POR CAER EN TENTACIÓN. TE PEDIMOS QUE TU AYUDA NOS SOSTENGA Y QUE NOS LIBRES DE TODO MAL, POR JESÚS, AMÉN.