
LECCIÓN: TRES ACCIONES DIVINAS EN NUESTRO FAVOR
VERSÍCULO PARA MEMORIZAR:
“Salva a tu pueblo, y bendice a tu heredad; Y pastoréales y susténtales para siempre”.
SALMO 28:9
COMENTARIO HISTÓRICO DE SALMOS 28
El Salmo tiene dos partes: Petición y adoración, con un verso central en el que se promete la respuesta del Señor a la oración del rey. El versículo nueve tiene cuatro verbos: salva, bendice, pastoréalos y guíalos:
1) SALVA A TU PUEBLO. Este verbo se traduce como “salvar, liberar, y socorrer” y se encuentra más de 200 veces en la Biblia, por ejemplo: “Porque así ha dicho el Señor Jehová, el Santo de Israel: En arrepentimiento y en reposo seréis salvos; en la quietud y en la confianza estará vuestra fortaleza. Pero no quisisteis” (Isa 30:15). Jeremías dice del rey mesiánico: “En sus días será salvo Judá, e Israel habitará confiado” (Jer 23:6);
2) BENDICE TU HEREDAD. La palabra bendición aparece 330 veces en la Biblia, comenzando por Gen 1:22 “Y Dios los bendijo, diciendo: Fructificad y multiplicaos”. El elemento central del pacto de Dios con Abrahán fue: “Te bendeciré y serás bendición. Bendeciré a los que te bendijeren, y serán benditas en ti todas las familias de la tierra” (Gen 12:2-3). Esta bendición de Dios se extiende a las naciones a través de Abrahán y por medio de su simiente;
3) PASTORÉALOS. En la Biblia se mencionan 170 casos en los que Dios se ofrece a pastorearnos. El verbo pastorear se usa en sentido figurado con la acepción de alimentar o animar. Se usa con referencia a Dios, el Gran Pastor, quien apacienta sus ovejas.
CITA SELECTA
“Adolecemos de una fe sencilla; necesitamos aprender el arte de confiar en nuestro mejor Amigo. Aunque no lo vemos, Jesús cuida de nosotros con tierna compasión; y se conmueve con el sentimiento de nuestras enfermedades. Nadie acudió jamás a él con fe, en medio de su gran necesidad, y salió descorazonado de delante de él… El cristiano es… el hombre más feliz del mundo. Se siente seguro, porque confía en Jesús y se regocija en su presencia. Su “escudo está en Dios, que salva a los rectos de corazón”. No posterguen este asunto, sino que comiencen… a fijar sus mentes más firmemente en Jesús y en las cosas celestiales, recordando que mediante la contemplación de él somos transformados a su misma imagen. Tengan confianza en Dios”. (EJ 370).
ORACIÓN:
PADRE NUESTRO, EXPRESAMOS NUESTRA GRATITUD POR SER EL GESTOR DE NUESTRA SALVACIÓN. TE IMPLORAMOS QUE DERRAMES BENDICIONES ABUNDANTES SOBRE NUESTRAS FAMILIAS Y SOBRE NUESTRAS FUENTES DE TRABAJOS. CONTINÚA PASTOREANDO NUESTRAS VIDAS. POR JESÚS, AMÉN.