EL CUERPO COMO TEMPLO

EGW diciembre 12, 2022
Escuchar el Post
Tiempo de lectura: 2 minutos

La mayor alabanza que los hombres pueden  ofrecer  a Dios es llegar a ser medios  consagrados por  los cuales pueda obrar. El tiempo  pasa rápidamente  hacia la eternidad. No retengamos de Dios lo que le pertenece. No le rehusemos lo que, aun cuando  no puede ser ofrecido  con mérito, no puede ser negado  sin ruina. Él nos pide todo el corazón; démoselo: es suyo, tanto por derecho  de creación como de redención. Nos pide  nuestra inteligencia; démosela, es suya.  Pide nuestro dinero; démoselo, pues es suyo. No  sois vuestros, «porque comprados sois por  precio».  1 Corintios 6:19, 20. Dios requiere  el homenaje  de un alma santificada,  que, por  el ejercicio de la fe que obra por medio del amor, se haya preparado  para servirle. Sostiene ante nosotros el más alto ideal, el de la perfección. Nos pide  que nos manifestemos  absoluta  y completamente  en favor de él en este  mundo,  así como él está siempre  en favor nuestro en la presencia de Dios (Los hechos de los apóstoles, p. 452).

Los hombres  no serán nunca  temperantes hasta que la gracia de Cristo sea un principio viviente en el corazón …

Las circunstancias no pueden  producir  reformas. El cristianismo propone  una reforma del corazón.  Lo que Cristo obra dentro, se realizará bajo el dictado de un intelecto  convertido. El plan de comenzar afuera y tratar de obrar  hacia el interior siempre ha fracasado, y siempre  fracasará. El plan de Dios con usted es comenzar con la raíz misma de todas las dificultades, el corazón,  y entonces del corazón  mismo surgirán los principios de justicia.  La reforma  será exterior así como  interior  ( Consejos sobre el régimen alimenticio, p. 40).

Amado, yo deseo que tú seas prosperado  en todas las cosas, y que tengas salud, así como prospera tu alma. 3 Juan 2.

El correcto  empleo  de  uno  mismo  es  la lección  más valiosa que  se puede  aprender. No debemos  realizar trabajo  mental  y detenernos allí, ni hacer  trabajo  físico solamente;  debemos emplear  de  la mejor  manera  las diversas piezas que componen la maquinaria humana: el cerebro, los huesos, los músculos, la cabeza y el corazón.

El uso  correcto  del cuerpo  incluye  todo  el ciclo  de las  obligaciones hacia uno  mismo,  el mundo y Dios.  Usense entonces  las facultades físicas en proporción con las mentales …

Pertenecéis  al Señor,  porque él os ha creado.  Le pertenecéis por  causa de la redención,  porque  dio su vida por  vosotros … Preservad  cada parte  de la maquinaria   viviente  para  que  podáis  usarla para  Dios.  Preservadla  para él. Vuestra  salud  depende   del  uso  correcto   del  organismo.  No  malgastéis ninguna  porción de las facultades dadas  por Dios, ya sean físicas,  mentales o morales.  Todos vuestros  hábitos  deben  ser puestos  bajo el dominio de Dios (Hijos e hijas de Dios, p. 173).

#NotasdeElenaGWhite
#RadioJovenAdventista
#MeditacionesDiarias

Notas de Ellen G. White para la Escuela Sabática 2022.
4to. Trimestre 2022 «¿QUÉ ES EL HOMBRE? “LA VIDA ETERNA: LA MUERTE Y LA ESPERANZA FUTURA”»
Lección 12: «LA COSMOVISIÓN BÍBLICA»
Colaboradores: Wilber Valero & Esther Jiménez

 

Loading